
TECNOLOGÍA Y OPERACIÓN

Los sistemas ACQUA SANA utilizan una tecnología basada en la teoría de la Magnetohidrodinámica (MHD) aplicada a los fluidos y específicamente a la lucha contra la cal.
El sistema, que está patentado (patente OMPIC N.º 63849), está compuesto por una serie de imanes permanentes ultrapotentes montados en oposición de polaridad y colocados en el núcleo de varios tubos de diferentes metales, lo que permite maximizar el impacto de los campos magnéticos generados por los imanes sobre el agua, garantizando al mismo tiempo una protección total frente a las influencias magnéticas en el exterior.
Al atravesar zonas de alternancia negativa-positiva, las partículas de carbonato de calcio presentes en el agua sufren una neutralización de sus cargas superficiales, según la teoría de la MHD, así como una modificación de su estructura cristalina, lo que las vuelve no incrustantes e impide que se aglutinen y formen sarro. La cal permanece en suspensión en forma de un polvo microscópico llamado aragonita. Este polvo es arrastrado por el flujo de agua hacia la evacuación.
El sistema no transforma, por lo tanto, la composición del agua, y la solución aportada es de naturaleza física.

La gama de sistemas ACQUA SANA es amplia. Cubre un amplio espectro de caudales que alcanza hasta 30 m³/hora o 500 litros/minuto.
El tamaño de las tuberías en las que se instalan los equipos va desde ¾ de pulgada hasta 3 pulgadas.
La potencia de los imanes nunca es inferior a 15 000 gauss y supera ampliamente los 25 000 gauss en cualquier punto de la corriente de agua para los sistemas más potentes.
La instalación es sencilla, ya que no requiere ninguna conexión a la red eléctrica. Se realiza directamente en línea sobre la tubería o mediante un bypass (derivación).
Su uso es posible tanto en agua fría como en agua caliente.
Los sistemas pueden instalarse indistintamente en posición horizontal o vertical.
